La fiesta de este 6 de junio de 2019, ha ocupado un lugar importante en el calendario de las 4 comunidades de Siervas de san José de la ciudad y del Colegio de la Sagrada Familia.
El Colegio ha celebrado esta fiesta con los siguientes actos:
El 2 de junio: DÍA DE LAS FAMILIAS Y CARRERA INCLUSIVA: “UNA VUELTA POR CHILE”, en colaboración con “Taller de Solidaridad, a favor del Hogar Bonifacia para niños con problemas familiares, en Colina. En ella han participado alumnos, familias y amigos.
Tuvo un carácter festivo: Charla, carrera, premios, comida gestionada por el AMPA (Asociación de madres y padres de alumnos) y diversiones varias. Es importante que la solidaridad sea motivo de fiesta y de unidad, como así se ha vivido.
El día 6 de junio: CELEBRACIÓN EN EL PATIO DEL COLEGIO a las 12 de la mañana en la que ha participado todo el Colegio. Juan Rodríguez, responsable del MSJ y profesor del Colegio elaboró el guión y desarrollo, que valoramos y agradecemos de corazón.
Las galerías del patio estaban adornadas con banderolas en las que aparecían símbolos de la representación, que se iban desplegando en el acto correspondientes. En el pozo, un mural con el rostro de Bonifacia y un precioso centro de flores blancas, junto a una lámpara y varios cordones.
En la escenificación de los alumnos se fue alternando el texto de la narración con música y canciones cantadas por todos. Tuvo los siguientes actos, participando en cada uno, diferentes grupos de alumnos.
ACTO 1: Pentecostés. Se hizo una evocación de Pentecostés visibilizando las lenguas de fuego y la luz llevada por un grupo de niños a todos los participantes como signo de la llegada del Espíritu.
ACTO 2: La Iglesia. Mientras un grupo de alumnos reparte papeles de colores con las palabras fe, trabajo y amor en varias lenguas, otros construyen la planta de una basílica que terminan por convertir en casa, mientras cantan “Somos una familia” de Migueli.
ACTO 3. Bonifacia.
Se presenta a Bonifacia como luz, como viento y como Palabra.
Una mujer que sintió el viento y el fuego del Espíritu para cambiar el mundo, para hacerlo mejor para las más pequeñas y olvidadas…
Bonifacia fue luz para muchas jóvenes sin recursos, que iba aceptando de una forma piadosa y les enseñaba un oficio: la cordonería. Destacó su gran bondad y generosidad, dedicando su vida a los demás.
Tres alumnas que encarnan a Bonifacia, a su madre, y a su compañera Socorro, recogen a algunas alumnas y les enseñan el oficio de cordonería. Otro grupo de alumnas se acerca a ellas pidiendo trabajo y las tres protagonistas las acogen con cariño.
Bonifacia fue viento con su talante y espíritu arrollador que, desafiando la época en la que le tocó vivir, fue ayudando a valerse por sí mismas a un grupo de mujeres trabajadoras. Ella les da ánimo y les sirve de guía. Es un apoyo fundamental en sus vidas.
Bonifacia fue Palabra y en este día dice una palabra a todo el Colegio: “Estoy contenta de cómo mi labor ha perdurado en el tiempo, representada en las paredes de este colegio y reflejada en todos vosotros”.
A continuación se representaron los frutos que nos regaló Bonifacia.
ACTO 4. Bonifacia fue paz
Bonifacia fue paz entre sus compañeras y hermanas cuando algunas buscaban que no la hubiera. Fue paz en la vida de muchas jóvenes a las que rescató y enseñó un trabajo y una manera de vivir. Fue paz en sus palabras y en su trabajo… Los pequeños en corros cantan Paz, paz, paz, de Juanes y luego una canción “Bonifacia hace la paz” creada por las tutoras.
ACTO 5. Bonifacia fue amor y bondad
Previamente a esta celebración se había trabajado en las aulas la historia de Bonifacia para acercar a los niños el amor y la bondad que ella demostraba a los demás. Para ello un corazón grande fue pasando por las clases para que cada alumno escribiera qué es el amor.
Bonifacia fue amor y bondad. Cada día, con la vista puesta en Jesús y pensando en Nazaret, fue abrazo para quien lo necesitó, trató con amor de madre y de hermana a quienes se movían a su lado. Y cuando vinieron tiempos difíciles, su respuesta fue siempre construir amor y bondad a su alrededor, abriendo puertas donde otros se las cerraban… Se escenifican tres acciones de amor y bondad que podemos realizar todos.
ACTO 6: Bonifacia fue perseverancia y modestia
Bonifacia fue también perseverancia. Construyó un proyecto nuevo con Butiñá, un proyecto de trabajo, de fe y de amor que muchos no supieron ver.
Se escenifican las dificultades de algunos grupos para conseguir lo que quieren hasta que, animados por otros compañeros, lo logran.
Bonifacia siguió adelante a pesar de las dificultades, puso por delante el proyecto…
Además de perseverante fue humilde, pensó que para que las Siervas siguieran, ella debía pasar a segundo plano y seguir siendo fiel a Dios lejos de su casa y de los suyos, desde la modestia y el silencio…
ACTO 7: Bonifacia es el Colegio
Bonifacia, que fue un regalo del Espíritu de Dios para todos, nos dejó muchos regalos. Nos dejó a las Siervas, que con su trabajo en todo el mundo han soñado nuevas vidas para tantas mujeres; nos ha dejado su carisma, que nos ayuda a construir un mundo mejor al estilo de Nazaret. Y nos ha dejado esta casa y esta familia que tanto nos regala cada día.
Finalmente los alumnos de 4º de la ESO comparten a todos su experiencia y recuerdos en el Colegio. Regalan a cada niño un globo y lanzan al espacio un manojo de globos como homenaje a santa Bonifacia en su fiesta, mientras todos cantan el himno del Centenario: Somos una familia hecha de amor…
EUCARISTÍA A LAS 7,30 H EN LA CAPILLA DEL COLEGIO, JUNTO AL SEPULCRO DE SANTA BONIFACIA
Las cuatro comunidades de Salamanca, como todos los años nos habíamos reunido previamente para preparar la Eucaristía del 6 de junio. Escribimos una carta invitación a bastantes sacerdotes de la diócesis enviándoles una breve biografía de Bonifacia e invitándolos a concelebrar en la Eucaristía. A través de la revista diocesana de Comunidad y en otros medios sociales, invitamos a participar en la Eucaristía a quienes quisieran hacerlo.
La capilla estaba llena de gente: Profesores, personal colaborador, antiguas alumnas, algunos niños, padres y madres de alumnos, familiares y amigos, Siervas de san José, todos reunidos por la santidad de una mujer seguidora de Jesús trabajador en Nazaret de la que tenemos mucho que aprender en nuestra vida de fe, trabajo y amor. 
Presidió la Eucaristía D. Domingo Martín Vicente, Delegado diocesano para el clero y vocaciones sacerdotales, y concelebraron con él 7 sacerdotes más. Sonia González de Tiedra cantó el salmo responsorial el coro del Colegio, dirigido por Ana y Paloma Martín, las demás canciones a las que nos unimos todos los presentes. 
En el ofertorio y comunión, el grupo charro de Chani del Brío, Fernando Peña y sus nietos, con la música de gaita y tamboril, pusieron una nota alegre y orante como recuerdo a las raíces salmantinas de Bonifacia.
En las ofrenda, junto al pan y el vino presentamos un ovillo, en el que queríamos significar el carisma vivido por santa Bonifacia. Un ovillo, que nos va uniendo en el trabajo, la fe y el amor y que toda la Familia Josefina estamos llamados a vivir, signo de vida y esperanza en los diferentes continentes donde nos encontramos. También ofrecimos una lámpara, signo de la fidelidad y confianza en el Señor de Bonifacia.
Al finalizar la Eucaristía, un aplauso rotundo abarcaba toda la fiesta, agradecimiento al coro, a todos los participantes y, por supuesto, a santa Bonifacia.
Continuamos la fiesta tomando lo que estaba preparado en el comedor del Colegio, porque ese día hacía frío en el patio. Las conversaciones se mezclaban con la alegría de las canciones y música charra.
Damos gracias por este día que nos congrega en torno a Bonifacia y nos ayuda a que sea más conocida su vida y su carisma, y a pedirle que, como ella, seamos testigos del Jesús encarnado en Nazaret en nuestro vivir cotidiano.
Rosario Hernández,
ssj
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